Hoy he salido de casa a eso de las tres y media de la tarde mas contento que unas pascuas y con una gana de bici de la buena; el cielo aunque encapotado no amenazaba agua, me había visto a Maldonado unas pocas de veces, la temperatura era bastante buena, por lo que llevaba la ropa básica para pasar el rato, pero nada mas llegar a la parte mas alta de esta historia se ha presentado una “tarde de la tres b” (baraja, brasero y bota) que nos ha jodido el entreno.
Para bajar de allí la cosa ya yo pintaba tan bien, las ruedas han tardado poco en aumentar su tamaño, las piedras mojadas ya no “molaban” y ha habido que extremar las medidas de seguridad; poco después y viendo un clarete hemos intentado escapar por el, pero ha sido inútil, estaba escrito que hoy pillábamos y lo hemos hecho, odio esa sensación tan mala que es ir con los pies mojados y ver que no tiene pinta de mejorar el tiempo, -aggg-.
La ducha de agua calentita a sido lo mejor después de este entreno pasado por agua, por lo menos me queda el consuelo de que las 2,30 que ha durado están en las patas y que de hay no se van a mover.
Esta noche Gala del Ciclismo Jiennense, esa es a cubierto por lo que no hay que temer nada, la única lluvia que habrá será la que le va a caer a mi estomago, -y fría fría-
Hasta luego.
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